08/04/2012 | Notas |

¡Que ya se acabe! ¡Por favor!

Los Pumas volvieron a perder, 0-1 ante el Pachuca, en el Estadio Olímpico Universitario. / Foto: IC MEDIOS

 

CLAUSURA 2012. México DF. Una derrota más. ¿Podría alguien hablar a la Femexfut y pedirles que se acabe el torneo YA? De verdad que está costando ver este cierre del Clausura 2012, en el que cada fin de semana se desmoronan las ilusiones de ver al menos un cierre digbno. Sí, cayeron de nuevo, esta vez ante el Pachuca, por 1-0 en Ciudad Universitaria.

A media semana Luis Fuentes dijo con mucha claridad que estos partidos iban a servir para determinar quiénes quieren quedarse y quiénes tendrán que sufrir la incertidumbre de saber si se quedan o no.

Y Fuentes por lo menos, es de los que tomó sus palabras en serio. Jugó con el corazón por delante e incluso, cuando se estaba acabando el partido, hizo brincar los corazones de todos los presentes en Ciudad Universitaria con un tiro maldoso que le costó trabajo atajar al portero del visitante.

Otro que jugó con orgullo y coraje fue el capitán Efraín Velarde, baluarte del equipo, líder sin Darío Verón, dominando su franja de terreno, impasable y cuando lo pasaron, no lo hicieron juntos el hombre y el balón.

Pero ¿Quién más? La defensa funciona, lo ha venido haciendo bien, sin que caigan demasiados goles, pero al final la presión es tanta que no pueden resistir. Y es que hablando en términos estadísticos, es normal que cualquier equipo reciba goles. El que le dio la victoria al Pachuca puede definirse como un error de Alejandro Palacios, sí, pero casi siempre alguien se equivoca cuando el balón termina meciéndose en la red.

Fue un tiro de esquina desde la derecha, el balón iba cerrado más o menos hacia el primer poste. El delantero tuzo, Félix Borja se adelantó a la marca. ¿A quién le tocaba? A Diego de Buen, que hizo su trabajo con pasividad, pero también, Palacios tardó en salir, una fracción de segundo, justo la que faltó para que llegara al balón antes y lograra golpearlo con los puños. Borja le pegó con la cabeza y lo mandó a la red.

Listo, un par de errores, como hay en todos los partidos.

Pero si tu equipo no hace lo suyo adelante…

Francamente ya es un poco de fastidio criticar cada semana a la delantera de los Pumas. Esta vez arrancaron con Javier Cortés, Emilio Orrantía, Alfonso Nieto y Juan Carlos Cacho. Y nada, algún destelló una combinación buena por ahí. Después ingresarían Martín Bravo y Eduardo Herrera, por Nieto y Orrantía, pero nada cambió. Sí, se reconoce en Martín Bravo las ganas con las que entra a jugar, pero no tiene quién le ayude a terminar las jugadas, y Herrera, lo decimos de nuevo, como cada semana, aún no está maduro.

Así que si nos atenemos a lo dicho por Fuentes, se salvan muy pocos jugadores y a como van las cosas, ya ni siquiera el entrenador. Y no es que Memo Vázquez lo esté haciendo mal, porque con tan pocas opciones no va a sacar soluciones de la manga, pero lo que está saliendo seriamente minada es su credibilidad ante sus jugadores.

Y es que llega un momento en el que después de tantas y tantas variantes y «soluciones» que no funcionan, los futbolistas invariablemente terminan cuestionando en su fuero interno si no será el entrenador el que está equivocado.

Esta vez la suerte acompañó a Pumas por lo menos para permitirle competir, porque el Pachuca juega horrible y apuestan sólo a lo que haga Guillermo Franco, sí, el Guille, sólo arriba, que no es mucho.

Así se fue el partido, cayó el gol tuzo gracias al sustituto de Franco, Borja, y los Pumas no pudieron responder.

¡Y todavía faltan TRES PARTIDOS!  ¡YA POR FAVOR! ¡QUE ACABE LA TORTURA!