13/02/2012 | Notas |

¿Quiénes se benefician de la eventual salida de Mahbub?

El presidente de los Pumas verá decidir su futuro en Marzo.

La continuidad del presidente del patronato que dirige los destinos de los Pumas, Víctor Mahbub, puede terminar en marzo próximo porque se celebrará la Asamblea Ordinaria del Club Universidad, donde dijo públicamente que le gustaría reelegirse.

Según los estatutos de la asociación, Mahbub solo podría estar cuatro años al frente del equipo, pero la propia asociación ha decidido que siga dos años más, e incluso puede determinar que siga indefinidamente, porque la Asamblea tiene la facultad de modificar sus propios estatutos.

Sin embargo, el pasado 29 de enero, durante el homenaje a los Héroes del 62, el Rector José Narro señaló que la permanencia de Mahbub depende del patronato y evitó darle algún voto de confianza claro.

En Redes Sociales se ha esparcido un rumor sobre la salida de Mahbub en marzo. Es obvio que puede darse la salida del dirigente.

El papel de los promotores

Pero los principales interesados en que haya un cambio de política en los Pumas son los que ven perjudicados sus intereses económicos por la política de no comprar refuerzos, y seguir formando su cantera, que sostiene a contracorriente Víctor Mahbub.

Buena parte de la andanada que recibió Mahbub al decidir que Pumas no contrataría refuerzos este torneo, se debió a que perjudicó los intereses de promotores que tenían listos a jugadores para el equipo, más allá del obvio perjuicio que acarrearía la medida.

Los promotores de jugadores tienen considerable influencia en los principales medios escritos de comunicación, más que por corruptelas que no son frecuentes, por el hecho de que son fuente inagotable de noticias “exclusivas”.

Pumas llegó a ser uno más en el su mercado de compra y venta de jugadores, principalmente en la era de Hugo Sánchez, cuando se fue desmantelando poco a poco la política de Pumas de formar a sus propios jugadores. Basta un dato: En el último torneo que dirigió Hugo al equipo llegaron a jugar en el mismo duelo hasta SIETE jugadores no formados por la cantera, y los canteranos que sobrevivían, eran figuras consolidadas. Los novatos tenían escasas posibilidades.

El jaloneo por la sucesión en Pumas va en esos dos sentidos: una inocultable crisis deportiva que estaba prevista desde antes del arranque del torneo, y los intereses que confluyen y en los que están de por medio muchos miles de dólares.