31/01/2012 | Notas |

Las lecciones del Pumas vs. Chivas

El rival también cuenta, es la lección que deja el Guadalajara tras presentarse en Ciudad Universitaria y marcharse con un punto bajo el brazo.

El empate a cero entre Pumas y Chivas es un ejemplo de como dos equipos que no se prestaron el balón no lograron armar un juego ofensivo. El planteamiento de ambos conjuntos los obligó a desarrollar un juego trabado en la media cancha, sin oportunidades de sobrepasar las líneas defensivas.

Las Chivas enseñaron en CU que parándose bien se puede salir airoso de una cancha tan difícil. El planteamiento de Nacho Ambriz y su ´Vocho´ jalisciense fue muy claro: la defensa atrás esperando a los delanteros pumas y  una línea de cinco en la media cancha, presionando y buscando  robarle el balón a los auriazules.

Los tapatíos tenían la misión concreta de no dejar pasar al rival en ningún momento y esperar a que un error de la defensa universitaria le diera la oportunidad de ofender al portero Alejandro Palacios.

En ese planteamiento el mediocampista de chivas, Marco Fabián, logró de forma constante despojar el balón a los medios universitarios presionando su salida, siempre detrás de la línea media, esperando el error y realizando movimientos diagonales cuando no tenía el esférico, que lo dejaban permanentemente libre para recibir sin presión y armar jugadas de peligro. Fabián no tenía a algún medio de pumas que lo marcará, aunque siempre encontró bien colocados a Darío Verón, Marco Palacios, Efraín Velarde y David Cabrera, que se impusieron ante los embates de la escuadra de Ambriz.

La línea media universitaria no logro descifrar el juego de Chivas. Se vieron obligados a buscar con pelotazos a un aislado Martín Bravo, que se canso de intentar pasar la férrea línea defensiva rayada, comandada por Héctor Reynoso.

Sí,  posiblemente un cero a cero espectacular, como dijo el defensa universitario Marco Palacios, pero un partido sin jugadas claras de gol. Por eso tenemos que recordar que en un juego de futbol el rival también cuenta, sobretodo cuando no te presta el balón.